Demencial Represion

DEMENCIAL REPRESIÓN

OSCAR Oscar Amaya Armijo

La paranoia golpista se ha desatado en todo el país, mantienen una represión brutal a gran escala contra la Resistencia. Se ha militarizado tánto el país que pareciera que hemos sido invadidos por un ejército extranjero.

Todas las avenidas y veredas de Honduras se han llenado de militares con pertrechos de guerra, y en algunas zonas fácilmente se detectan los francotiradores, estratégicamente ubicados en cerros y arboledas, dispuestos a disparar contra la población desarmada.

Es enorme, demencial, el clima de terror guerrerista: retenes a la vuelta de la esquina, registros, requisa de papeles, policías motorizados, sirenas, balaceras, vigilancia de puesto fijo y en movimiento, cateos, persecuciones, heridos, muertos, desaparecidos, torturados, helicópteros sobrevolando barrios populares, amenazas abiertas y veladas. En pocas palabras, el facismo en pleno su explendor.

En Honduras, pues, estamos en plena guerra: un ejército armado hasta los dientes contra una población desarmada, indefensa. Es la guerra mas desigual que registrará la historia moderna. Los militares se enfrentan (con el perdón de Cervantes) con molinos de vientos, trocados en seres infernales, existentes solo en la mitomanía golpista.

Según los observadores, la policía y y el ejército se comportan como verdaderas jaurías contra sus propios compatriotas, sin ningún miramiento humano o legal. Pero ellos no actúan solos, reciben órdenes de su amo: el Complejo Militar Industrial de los Estados Unidos, del cual son simplemente un apéndice.

Esta represión, en el marco eleccionario, confirma el carácter espurio de los resultados que se obtengan el 29 de noviembre, en lo que han denominado “la farsa electoral”.

La saña con que actúan la policía y el ejército demuestra el desprecio y odio que la oligarquía y el Pentágono sienten contra la Resistencia hondureña, movimiento que no ha parado de manifestar su oposiciòn al golpe de Estado, pese a las adversidades.

Pero esta demencial represión no detendrà el accionar del movimiento popular hondureño contra el golpe, pues su estructura y tamaño es enorme y , especialmente, por su capacidad de convocatoria y disposición combativa.